Por: Novicias, Noviciado San José
Del 10 al 13 de enero, en el noviciado “San José “de La Ceja, Antioquia; se llevó a cabo el taller sobre Madre Mazzarello y los votos para las novicias de la CINAB, animado por sor María Victoria Montoya, Inspectora de la provincia de María Auxiliadora.
El encuentro fue iluminado por la cita bíblica: “Dijo, pues, Moisés: «Voy a acercarme para ver este extraño caso: por qué no se consume la zarza.»" (Ex 3,3). Sor María Victoria nos motivó a mirar la figura de Madre Mazzarello como la de la zarza ardiendo que Moisés encontró en el desierto, ya que la Madre es esa zarza humilde y pequeña, pero llena de Dios que nunca se apagará; su espíritu, vive en cada una de las FMA, misioneras de esperanza y alegría en el mundo, nos invitó a reavivar esa zarza humilde, que penetra la historia de vida de las jóvenes para que la asimilemos con mayor intensidad el espíritu de la Madre Mazzarello y descubramos en ella, unificados, todos los aspectos del Carisma que dan vida y esencia a la Salesiana de hoy.
Al referirse a los votos y cómo Madre Mazzarello los vivía, sor María Victoria afirmó que se puede observar en la vivencia de los mismos una unidad que no es fragmentada, es decir, no se puede solamente vivir el voto de la castidad o de la pobreza, todos los votos son una totalidad que da identidad a las FMA.
Durante el taller nosotras pudimos estudiar como Madre Mazzarello asumió la vivencia de los votos, mediante la confrontación con las fuentes: sus cartas, conferencias y buenas noches.
Testimonios de las novicias:
“Hemos vivido un encuentro lleno de experiencias, riqueza del carisma salesiano. Sor María Victoria Montoya con su testimonio de vida y sabiduría nos ha transmitido el espíritu vivo y lleno de amor que inundaba a Madre Mazzarello, damos gracias a Dios y al Instituto por estos espacios de formación que nos abre a nuevos horizontes y nos invita a corresponder con fidelidad y alegría el llamado que Jesús nos hace siendo siempre fieles a las Constituciones.”
El estudio realizado en estos días, nos confirmó que Madre Mazzarello es modelo de humildad, de sensibilidad educativa, de maternidad espiritual, de discernimiento, de trabajo y de alegría. Su santidad vivida en lo concreto, pone de manifiesto el sentido de vivir en lo ordinario de manera extraordinaria, y de esta manera da testimonio del seguimiento de Jesús mediante la práctica de los votos, unificándolos para el bien de la juventud.