Por: Comunicación CMM
Del 2 al 4 de junio de este año, sor Vilma Lucía Ramírez participó del congreso de Vida Religiosa: “Para vinos nuevos, odres nuevos” preparado por la CRC. Este congreso se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá, en el Auditorio San Agustín del Colegio Agustiniano Ciudad Salitre.
Con este congreso, la CRC se propuso:
- Reconocer que como vida religiosa nos corresponde arriesgarnos al filo de la incertidumbre, sin treguas, ni lamentaciones, para salir hacia las periferias en condición de Profetas, Discípulos y Misioneros.
- Reconocernos HERMANOS, Convocados al arte de la Comunión y llamados a la renovación: Para vinos nuevos, odres nuevos, como desafío para habitar, en las periferias sociales y existenciales donde la vida clama.
Sor Vilma nos compartió su visión personal de estos días de encuentro con la CRC:
“Hice experiencia gratuidad y bendición: por el don de mi vocación y del carisma salesiano; gratuidad y generosidad: por Sor Marleny y el consejo que me brindaron esta oportunidad; gratuidad y predilección por ser parte de la Vida Consagrada Colombiana”.
Además, centró su mirada en una de las temáticas centrales, con la que iluminó la reflexión del segundo día de la asamblea provincial, dictada por el Padre Felicísimo Martínez Díez: Fidelidad evangélica ¿plenamente felices?
El Primer nivel de la felicidad es la Fidelidad a la profesión Pública: ¿Cuáles son los niveles de satisfacción personal que permite desarrollar este estilo de vida? Cuáles son legítimos? ¿Cuáles los ilegítimos? ¿Dónde hallar las fuentes de satisfacción personal?
El tercer nivel que nos jugamos la satisfacción personal es la MISIÓN: Una vida sin misión es una vida vacía, sin sentido; una vida con misión es una vida que da gusto
Como síntesis, compartimos las 10 frases que marcaron la trasmisión de este congreso
1. En tiempo de crisis no hacer mudanza
2. Aventura de Fidelidad en el Espíritu.
3. ¡Plenamente felices!
4. No hay que privatizar la profesión religiosa
5. Tener calidad de vida depende en gran medida de la convivencia comunitaria
6. Atención a nuestras hermanas mayores
7. En la misión nos jugamos la satisfacción personal
8. Una vida con misión tiene sentido, da gusto, ¡tiene sabor!
9. Vivir cada día como si fuera el último…
10. Espiritualidad, comunidad, misión: ¡Una Vida Consagrada emocionante!